Rebelarse. Frente Panocha.

 

No vamos a negar que ninguno de nosotros, ni los más pesimistas, esperábamos encontrarnos en esta situación pero tampoco vamos a buscar excusas que lo justifiquen. Si estamos así es simplemente por méritos propios y porque lo merecemos. Te puedes lamentar pero eso no va a cambiar la situación; no le des más vueltas.

Ante este panorama uno tiene que decidir si opta por rebelarse o por ser autocomplaciente. 

De este modo, si uno considera que la situación “es la que es” y que no hay visos de poderla cambiar, lo mejor es la segunda opción, sin duda, y dejarse llevar. Total, “es lo que hay”.

Rebelarse, por contra, demanda tener una actitud diferente para resistirse y pelear para revertirlo. Es optar por cambiar la situación y alcanzar cotas mayores.

Rebelarse, por tanto, es compromiso, esfuerzo y  determinación. Es huir de los halagos y aislarse del ruido y se las críticas para enfocarse en la consecución de objetivos que te hacen mejor profesional, mejor persona, mejor deportista… 

Rebelarse es tener certeza y convicción. Es humildad para “aceptar tus cartas” y tus medios pero también rebeldía para no aceptar que cualquier creencia, especialmente las limitantes, marquen y delimiten tu destino y, por ello, tus logros. Es gallardía y coraje para afrontar todos los desafíos a los que nos enfrentamos.

Rebelarse es no fustigarse por los errores, es superar obstáculos y decepciones que uno  encuentra todos los días. Es aprender de las malas decisiones, de los malos comportamientos para que no vuelvan a producirse.

Rebelarse es no fallar a los tuyos, a los que confían en ti y son testigos de tu sacrificio. A los que te rodean y alientan y que también se sacrifican por ti.

Rebelarse es tener confianza en uno mismo, pelear por lo que quieres lograr con determinación, con carácter. No es esperar ningún regalo, ningún milagro, porque no lo hay. 

Rebelarse tiene un ingrediente principal que es el esfuerzo, el aprendizaje a no ser autocomplaciente y convencerse que no hay atajos. Mentalizarse que es un proceso largo que requiere paciencia, convencimiento y, sobre todo, mucha constancia y determinación. 

Rebelarse dista mucho del conformismo de personas que no tienen el orgullo ni la ambición por conseguir algo grande en sus vidas…

Por tanto, no sabemos si tras leer todo esto te puedes considerar una persona de las que se rebela, es posible, pero lo que sí sabemos es que únicamente el tiempo nos mostrará si efectivamente fuiste uno de los que optaron por rebelarse.

Frente Panocha.

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