La buena suerte no existe. Cd. Villacañas 5 - Talavera B CF 4.

 Un compañero de trabajo siempre nos recuerda que la buena, o mala, suerte no existe. “Eso no existe, todo es resultado de las decisiones que tomamos y de la forma en la que afrontamos cualquier situación”. 

Y no os voy a engañar, la verdad que siempre he creído, y en cierta medida creo, en la buena suerte, y no, no lo digo para tratar de salvar esta entrada del blog pero es que cada vez que sale la conversación nos convence de que estamos totalmente equivocados.

“Mira, eso de la buena suerte es simplemente una justificación para convencerse de que todo escapa a nuestro control, o para desmerecer lo que alguien ha conseguido con todo merecimiento por su esfuerzo, actitud y por haber sabido tomar las decisiones correctas”.

Y puede que tenga razón, no lo negaré, pero sí que creemos que puede haber siempre ciertos aspectos que inclinen la balanza para conseguir un resultado que a la postre resulte satisfactorio.

Además, es muy seguidor de la NBA y de Rafa Nadal y siempre los cita en sus ejemplos: “Acaso los que triunfan en la vida lo hacen sola y exclusivamente por su buena suerte?” “¿Te imaginas a alguien diciéndole a Nadal, ey tío, qué buena suerte tienes, has ganado 14 Roland Garros? ¿O a LeBron, ey tío que buena suerte tuviste ganando el anillo encestando todos esos triples que os dieron la victoria?”.

Pero también tiene ejemplos más mundanos del estilo: “Mira, a mí me han comentado en alguna ocasión, ¡qué suerte tienes por estar trabajando ahí! Y siempre les contesto lo mismo, ¿suerte? 

Suerte es el esfuerzo y sacrifico que tuvieron que hacer nuestros padres para que pudiéramos estudiar, las noches sin dormir preparando exámenes o los meses de veraneo fregando platos en Inglaterra por un salario de mierda, explotado, para aprender algo inglés. Esa fue mi suerte, sacrificarnos en casa, trabajar duro y prepararme lo mejor posible para todo aquello a lo que tendría que enfrentarme en la vida.”

A veces no puedes ni tan siquiera contestarle, pues todo lo que afirma lo hace con una seguridad y una rotundidad que deja poco espacio para iniciar un debate. Y creo que seguiré auto engañándome pensando en esa pequeña dosis del factor suerte que a veces puede ser determinante pero me voy convenciendo poco a poco que muchas veces el resultado que obtenemos obedece exclusivamente a la actitud, al esfuerzo y a la determinación con la que afrontemos una situación en la vida.

Lo que a día de hoy es cierto es que es muy valorable lo que todos hemos conseguido en estos años y tenemos pleno convencimiento de que si seguimos trabajando con esfuerzo y sacrificio, con una actitud adecuada, podemos seguir mejorando y consiguiendo todo lo que nos propongamos; a pesar de las adversidades que tendremos que afrontar por el camino.

Y lo único y quizás más destacable del partido de ayer es que dimos un pasito más para asegurarnos jugar otro año en Tercera. De poder seguir disfrutando de partidos importantes en nuestro municipio, continuar recorriendo kilómetros por la Comunidad visitando otros campo. Y lo haremos desde una grada de animación que para muchos es la envidia de la categoría. 

Otros equipos, o aficionados rivales, ni pueden, ni podrán, afirmar estas cosas, y de hecho algunos simplemente lo tacharán de mera buena suerte. 

En cambio, estoy seguro que mi compañero si lee estas líneas pensará todo lo contrario.

Frente Panocha.

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